La falta de gestión en la distribución de alimentos en Argentina lleva a Conin, junto a organizaciones sociales, a repartir leche en polvo próxima a vencer, evidenciando la crisis en el manejo gubernamental de la emergencia alimentaria.
La organización Conin, liderada por Abel Albino, se ve obligada a colaborar con comedores sociales para distribuir leche en polvo cercana a vencer debido a la ineficacia del Ministerio de Capital Humano. A pesar de la falta de estructura de Conin, la entrega se articula con organizaciones como el MTE-UTEP, el Movimiento Evita y la Corriente Clasista y Combativa. Mientras tanto, la crisis económica y la inflación empujan a más personas a la pobreza, exacerbando la necesidad de asistencia alimentaria en todo el país.
Tras quedar envuelto en un escándalo por la retención de 5 mil toneladas de comida, la funcionaria fue obligada por la Justicia a implementar un plan de entrega urgente: eligió a la polémica fundación Conin –cuyo máximo representante niega el preservativo-, que no tiene estructura suficiente y que acabó por articular la entrega con las demonizadas organizaciones sociales y políticas que tienen comedores y merenderos en distintos puntos del país.
Según denunció el referente social Juan Grabois en sus redes sociales el Gobierno llevó a cabo el plan que le exigió la Justicia “sin ningún plan de acción, criterio ni auditoría”. Conin, dijo, “no tiene suficientes centros y voluntarios para distribuirla, invoca a los fantasmas y recurre a los movimientos sociales”