El legislador del espacio Activar negó las acusaciones y aseguró que su renuncia busca facilitar su defensa en igualdad de condiciones.

El diputado provincial de Misiones, Germán Kiczka, presentó su renuncia este sábado en medio de una investigación en la que está vinculado por presunto tráfico de pornografía infantil. Kiczka, perteneciente al espacio político Activar, negó categóricamente las acusaciones en su contra, afirmando que «no tengo absolutamente nada que ver con lo que se me acusa. Todo lo que se dijo en los medios en las últimas horas es falso».

La decisión de Kiczka de renunciar fue formalizada a través de un escrito dirigido al presidente de la Cámara de Representantes de Misiones, Oscar Herrera Ahuad, en el cual solicitó que su renuncia «sea aprobada de forma oficial». En el documento, Kiczka explicó que su renuncia se debe a la necesidad de concentrarse por completo en su defensa en la causa penal de la que es objeto. «En este contexto, lo más prudente es apartarme de mi función pública, renunciando a los fueros y a la investidura que el cargo conlleva, con el fin de enfrentar el proceso judicial en igualdad de condiciones y demostrar mi inocencia», señaló el diputado.

El partido Activar, liderado por el libertario Pedro Puerta, ya había solicitado la renuncia de Kiczka, instándolo a ponerse a disposición de la justicia «sin fueros». La solicitud se produjo tras una serie de allanamientos realizados por agentes especializados en cibercrimen de la Policía de Misiones en la casa del legislador, así como en las viviendas de su padre y su hermano en Posadas, en el marco de una investigación sobre tráfico de material de abuso sexual infantil en internet.

Durante los operativos, se incautaron dos teléfonos celulares y una computadora. La causa tiene un alcance internacional y se inició hace dos años a pedido de la embajada de Estados Unidos. Kiczka, en un comunicado posterior a su renuncia, sostuvo que la investigación se refiere a familiares directos suyos, pero no a él personalmente.

La renuncia de Kiczka marca un giro significativo en su carrera política, en medio de graves acusaciones que ahora deberá enfrentar en el ámbito judicial.