La aseguradora alemana Allianz estima que las recientes olas de calor en el hemisferio norte podrían reducir el crecimiento económico mundial en 0,6 puntos de Producto Bruto Interno (PBI), afectando principalmente a países como China, España y Grecia.
Un informe publicado por la aseguradora alemana Allianz sugiere que las olas de calor recientes en el hemisferio norte podrían tener un impacto negativo en el crecimiento económico mundial. Se estima que estas olas de calor podrían reducir el crecimiento global en 0,6 puntos de Producto Bruto Interno (PBI).
El estudio señala que países como China podrían ver un impacto de 1,3 puntos porcentuales en su crecimiento debido a las altas temperaturas. España podría experimentar una reducción del crecimiento en 1 punto porcentual, mientras que Grecia, Italia, Estados Unidos y Francia podrían enfrentar reducciones de 0,9, 0,5, 0,3 y 0,1 puntos porcentuales respectivamente.
El observatorio europeo Copernicus anunció que julio de este año fue el mes más caluroso registrado en la Tierra, superando el récord anterior de julio de 2019 en 0,33 grados.
El informe enfatiza que el cambio climático está aumentando la frecuencia e intensidad de las olas de calor, sequías e incendios forestales, lo que afecta tanto a las personas como a las economías. El estudio considera que estos eventos climáticos extremos no solo tienen un impacto inmediato en la vida diaria, sino que también pueden influir en la productividad y la actividad económica.
El estudio de Allianz toma en cuenta el impacto en la productividad que el calor extremo puede tener en el trabajo. Se estima que un día de calor extremo (por encima de 32 grados Celsius) tiene un impacto en la productividad equivalente a medio día de huelga. Esto afecta a la productividad laboral, lo que puede ser más pronunciado en países con exposición y vulnerabilidad climática.
Además, el calor extremo puede reducir la totalidad de horas potenciales de trabajo en el mundo en un 2,2%, lo que equivale a 80 millones de puestos de trabajo a tiempo completo. En 2021, se perdieron 470.000 millones de horas potenciales de trabajo, un aumento del 37% en comparación con el promedio de la década de los 90.
El informe subraya la necesidad de prepararse y adaptarse al cambio climático, especialmente en áreas urbanas. Propone medidas como la creación de espacios verdes en las ciudades y la adaptación de los lugares de trabajo para mitigar los impactos económicos y sociales de las olas de calor.