Con un destacado cuarto lugar a nivel mundial en generación de energía eólica y solar, Uruguay refuerza su compromiso con la sostenibilidad energética.
Uruguay ha consolidado su posición como pionero en energías renovables, ubicándose en el cuarto lugar a nivel mundial en generación eólica y solar, solo detrás de Luxemburgo, Dinamarca y Lituania, según un reciente informe de SEG Ingeniería que utiliza datos de UTE y Our World in Data.
Con una impresionante proporción del 48% de su energía generada a partir de fuentes eólicas y solares, Uruguay no solo lidera en América Latina sino que también se destaca en el escenario global. El informe muestra a Chile como el otro representante latinoamericano en la lista, con un 32% de su energía derivada de estas fuentes renovables.
A pesar de su exitosa estrategia, Uruguay aún se encuentra detrás de Luxemburgo, que lidera con un 68%, seguido por Dinamarca con un 67% y Lituania con un 57%. La lista de los quince mejores países también incluye a Grecia, Países Bajos, España, Portugal, Alemania, Namibia, Irlanda, Reino Unido, Australia y Bélgica, resaltando la diversidad geográfica en la adopción de energías renovables.
Avances y Reconocimientos Internacionales
Uruguay no solo ha mantenido una estrategia efectiva en la generación de energías renovables, sino que también ha logrado el 100% de generación eléctrica renovable en varios días del presente mes, gracias a la combinación de hidroelectricidad, eólica y biomasa. Este logro es parte de la segunda transición energética que el país está llevando a cabo.
El notable incremento del 15% en la generación eólica entre 2015 y 2023 ha hecho que Uruguay sea reconocido internacionalmente como un modelo a seguir. La embajadora de Estados Unidos en Uruguay, Heide Fulton, destacó recientemente la importancia del ejemplo uruguayo para el mundo, especialmente en un contexto global que busca la descarbonización y la sostenibilidad.
Implicaciones y Futuro
El liderazgo de Uruguay en energías renovables no solo beneficia al medio ambiente y reduce la dependencia de combustibles fósiles, sino que también posiciona al país como un socio estratégico en iniciativas globales de sostenibilidad. Este avance subraya el compromiso del gobierno uruguayo con políticas energéticas que no solo abordan las necesidades actuales sino que también preparan al país para un futuro más verde y sostenible.
En resumen, Uruguay no solo está marcando la pauta en Latinoamérica, sino que también está sentando un precedente importante para la adopción y expansión de energías renovables a nivel mundial.