UC Global, una compañía de seguridad española, y su dueño, David Morales, están bajo sospecha de haber espiado para la CIA de Estados Unidos las reuniones del expresidente ecuatoriano Rafael Correa con otros exmandatarios latinoamericanos.
Una empresa de seguridad española llamada UC Global y su propietario, el exmilitar David Morales, están siendo investigados por la justicia de España debido a las sospechas de que espiaron para la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos las reuniones del expresidente de Ecuador Rafael Correa con otros exmandatarios latinoamericanos. La compañía había sido contratada previamente por Correa para brindar seguridad a la embajada ecuatoriana en Londres, donde Julian Assange, fundador de Wikileaks, estaba refugiado.
De acuerdo con la información obtenida de la revisión del contenido de la computadora portátil de Morales, ordenada por el juez Santiago Pedraz de la Audiencia Nacional española, UC Global espió en 2018 conversaciones de Correa con expresidentes como Cristina Fernández de Kirchner de Argentina, Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff de Brasil, y José Mujica de Uruguay.
La revisión de la computadora también arrojó pruebas de que la CIA estaba vinculada a las actividades de UC Global. El nombre de la CIA aparecía registrado varias veces en un disco duro externo que Morales utilizaba para almacenar información sobre las operaciones de su empresa. Esta evidencia se suma a las investigaciones que se llevan adelante contra Morales desde hace más de tres años por diversos delitos.
Se reveló que Morales ordenó a sus empleados espiar las reuniones de Assange con sus abogados y también las reuniones de Correa, tanto durante su mandato presidencial (2007-2017) como después de que concluyera su gobierno. Esta información era reportada al sucesor y adversario político de Correa, Lenín Moreno.
La investigación también descubrió que UC Global instaló troyanos en los teléfonos móviles de las hijas de Correa, Sofía y Anne, mientras estudiaban en Francia, con el propósito de escuchar sus conversaciones sin que sus padres estuvieran informados.
La noticia ha puesto de manifiesto la preocupación por las actividades de espionaje y la implicación de una empresa privada en operaciones de inteligencia vinculadas a la CIA en la región latinoamericana. La Justicia continuará con las investigaciones para determinar la extensión y las consecuencias de estas acciones.
