Miles de venezolanos se manifiestan en las calles de Caracas y otras ciudades, denunciando fraude electoral y exigiendo la salida del presidente reelecto Nicolás Maduro. La tensión se intensifica con la respuesta de las fuerzas de seguridad.

Caracas vive una jornada de intensas protestas tras el anuncio de la reelección de Nicolás Maduro como presidente de Venezuela. Cientos de manifestantes, en su mayoría jóvenes, salieron a las calles de barrios populares como Petare, Catia y Santa Mónica, para expresar su rechazo al resultado electoral proclamado por el Consejo Nacional Electoral (CNE).

Entre cacerolazos y gritos de «¡Y va a caer, y va a caer, este gobierno va a caer!», los ciudadanos denuncian un fraude en los comicios, que según el CNE, dieron a Maduro un 51,2 % de los votos. La indignación se ha materializado en la quema de carteles con la imagen del mandatario y el cierre de comercios en señal de protesta.

La manifestación también se extendió a otros puntos del país, como Coro, en el estado de Falcón. En Caracas, la policía y fuerzas de seguridad respondieron con gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes, que se concentraban en avenidas principales y cercanías de los centros de poder, incluyendo el palacio presidencial de Miraflores.

Los disturbios reflejan el descontento popular y la creciente tensión en el país, donde la oposición y gran parte de la comunidad internacional cuestionan la legitimidad del proceso electoral y la continuidad del chavismo en el poder.