El sindicato ATE denuncia una «purga masiva» en la administración pública y exige la inmediata reincorporación de los trabajadores despedidos.
La Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) ha registrado más de 2.300 despidos en la Administración Pública Nacional durante el fin de semana, desencadenando una serie de protestas y huelgas en todo el país. Rodolfo Aguiar, Secretario General de ATE, calificó las cesantías como un «plan sistemático para destruir el Estado», comparando la situación con una dictadura por la magnitud y la rapidez de los despidos.
El sindicato ha convocado a una jornada de protesta a partir de las 9 de la mañana en la sede nacional del Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), en Buenos Aires. Aguiar destacó que los despidos afectan gravemente no solo a los trabajadores, sino también a sus familias, condenándolos a una «muerte civil».
Entre los organismos más afectados se encuentran la Secretaría de Derechos Humanos con 700 despidos y el Ex Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad con 450 cesantías, representando el 80% de su personal. Además, el Ex Ministerio de Desarrollo Social ha visto 370 despidos en sus sedes y centros de referencia en todo el país, mientras que el INTI reportó 285 cesantías.
El sindicato advirtió que el número de despidos podría aumentar a medida que se recopile más información de otras provincias y organismos. ATE ha implementado un Monitor de Despidos para contabilizar el impacto de estas políticas y planea intensificar las medidas de fuerza en respuesta.
«El empleo público es fundamental para garantizar los derechos sociales, económicos y culturales de la población. Cada puesto de trabajo que se pierde significa una política pública que se desmantela y un derecho que se vulnera», afirmó Aguiar. El líder sindical instó a todos los trabajadores estatales a no dudar en utilizar la huelga y la movilización como herramientas de lucha frente a este «doloroso presente».
La situación ha generado un amplio rechazo entre los sindicatos y sectores sociales, quienes consideran que estas medidas son una amenaza directa al bienestar y los derechos de la ciudadanía. La ATE continuará con sus acciones de protesta hasta lograr la reincorporación de todos los trabajadores despedidos.